Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).
Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.
El médico Miguel Gil Casares registró la marca en este año. La etiqueta ha sobrevivido a modas de imagen y revoluciones de diseño. Fue creada en este mismo año por el joyero y azabachero gallego Enrique Mayer y ha marcado el estilo propio de la casa, cargado de autenticidad.
Mosela gallego
La botella rin forma parte de su identidad y evoca los lazos germánicos del propio vino. Miguel ejerció su propfesión en Alemania y más tarde su hijo Juan Gil y Armada, a mediados de siglo, utilizó este insospechado Mosela Gallego como reclamo publicitario.
2020
Cada aroma, cada sensación evoca el paisaje de procedencia. La sapidez, la tensión con la que atraviesa el paladar y los matices que enseña (hierba fresca, flor de infusión, manzana verde...) sugieren granito, brisa marina y paisaje gallego. No se le puede pedir más a un vino.
Puro Salnés
En la viña todo ocurre en torno a Cambados, esa fabulosa población marinera sacada de un cuento. En plena comarca del Salnés y en el centro neurálgico del vino de Rías Baixas, cada año se recogen las uvas impregnadas con el sabor único y el nervio arrebatador del Atlántico.
Palacio de Fefiñanes es una de esas casas con las que siempre se acierta si lo que buscamos es un albariño serio, sin excesos aromáticos, pero sin embargo portentoso en expresión. Pero esa fiabilidad no solo es infalible en el presente, sino en el futuro. Este albariño ha sido uno de los que ha liderado esa nueva forma de entender las elaboraciones más noveles de una bodega. Sin duda, la mejor forma de disfrutar de él es en el segundo e incluso tercer año desde su elaboración.