• Laura S. Lara
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• 2023-05-31 00:00:00

Después de 16 años al frente del departamento de comunicación del Consejo Regulador de la D.O.P. Navarra, la periodista se enfrenta a un nuevo reto para su carrera profesional desde la gerencia de la misma con la vista puesta en el brillante futuro de los vinos navarros.

C omo responsable de Comunicación del Consejo Regulador de la D.O.P. Navarra, Elena Arraiza se ha dedicado a divulgar los vinos navarros apoyándose en su experiencia como periodista. O, como ella misma afirma, a "disfrutar difundiendo y promoviendo la cultura del vino navarro". Una #NavarraWineLover de manual que, tras 16 años en el área de comunicación, se atreve ahora a dar el salto a la gerencia de la Denominación. Un reto y, al mismo tiempo, una motivación. "Como periodista, el inicio de mi trayectoria laboral estuvo ligada a los medios de comunicación. Me trasladé a Madrid para trabajar y estudiar un máster de Dirección de Comunicación con la intención de quedarme a vivir por un tiempo, ya que adoro la ciudad. Pero Navarra llamó a mi puerta y volví a mi tierra", recuerda. Así, en 2007, se incorporó al Consejo Regulador de la D.O.P. Navarra, desarrollando labores de comunicación hasta agosto del año pasado. "Después de 16 años, asumí la gerencia. Un gran reto que acepto desde la misma silla, pero con otras metas más ambiciosas. Estoy encantada de poder participar activamente en la evolución de la trayectoria de la Denominación. Hoy trabajamos en la Navarra del futuro, en la Denominación de Origen que queremos dejar a las nuevas generaciones. Es una gran responsabilidad de la que espero seguir siendo muy consciente, porque tenemos que ser capaces de asegurar su pervivencia para por lo menos otros 90 años, que son los que actualmente tiene Navarra".
Arraiza asegura que el mundo del vino empezó a interesarle a "nivel usuario" en un principio, para luego convertirse en el centro de su trabajo desde una de las facetas más atractivas, la de la comunicación. "Desde entonces tengo un gran respeto por este sector y me siento en continuo aprendizaje, soy muy consciente de lo vasta y enriquecedora que es la cultura del vino y la amplitud de su conocimiento", explica. Nadie mejor que ella para explicarnos las singularidades de los vinos navarros y las razones por las que el consumidor debería apostar por ellos actualmente. "Navarra es afortunada porque se sitúa en un enclave privilegiado que aporta una frescura transversal a todas las elaboraciones (blancos, rosados y tintos); no solo cuenta con la variable de la altura, sino también con la de la latitud, que es una gran arma contra los efectos del cambio climático", adelanta la experta. "En la D.O.P. Navarra se ubican algunas de las viñas más septentrionales de la Península Ibérica. Esta particularidad, unida al delicado método de elaboración, hace que los rosados sean uno de nuestros buques insignia, con una marcada identidad. La situación geográfica y la influencia atlántica dotan de autenticidad a la Garnacha, uva emblemática de la región que se distingue por su sutileza y suavidad. Estas son las tres singularidades de Navarra: los rosados, la autenticidad aportada por la Garnacha y la frescura".

La edad de oro de los vinos navarros
"Navarra vive un momento vibrante. La nave se ha reconducido para reconquistar a los distintos mercados con un mensaje claro y muy definido tras los golpes recibidos por los efectos de la pandemia o bien las crisis derivadas de los problemas geopolíticos. Ante la adversidad, Navarra se ha armado para navegar por aguas bravas. En los próximos años va a trabajar para incrementar sus fortalezas y espero que poco a poco se vayan viendo los resultados", confía Elena Arraiza. Resultados, puntualiza, que son urgentes y necesarios para los navarros, ya que el sector vitivinícola atraviesa una coyuntura de redefinición que no es fácil y que la gerente de la Denominación califica como "crítica". En esta nueva etapa, las fortalezas de la D.O.P. Navarra, entre las que destaca comunicar el territorio, están más presentes que nunca. "La redefinición de la D.O. se va a ver plasmada en los próximos planes estratégicos de promoción, que harán especial incidencia en aportar valor a la región para que las bodegas tengan herramientas para posicionar sus vinos en el lugar en el que se merecen y para que se reconozca su esmerado trabajo. Una de las principales claves reside en el territorio, desde luego, porque cada vino es el epílogo de un relato que solo puede ser novelado en un único origen, en el que hunde sus raíces. Navarra encuentra una de sus fortalezas en su ubicación privilegiada que otorga, entre otras cosas, una frescura característica a sus vinos", defiende. ¿De qué manera se da a conocer todo esto? Nos lo explica Arraiza: "Por un lado, a través de los propios vinos. Como se suele decir: para muestra, un botón. Y, por otro lado, contando esas características que a los que allí vivimos nos parecen tan habituales. La riqueza de suelos que son ancestrales y las condiciones climáticas y geográficas únicas que moldean nuestros viñedos. Es el gran tesoro que acuna Navarra. Siempre digo que un navarro solo puede nacer en Navarra y en Navarra solo nacen los navarros".
Primero desde el Departamento de Comunicación y ahora desde la gerencia, Elena Arraiza conoce como nadie los entresijos de la Denominación de Origen y cree tener la clave para acercar los vinos de su tierra a la gente joven. "Desde que me enrolé en este equipo, hace cerca de 17 años, el público joven ha estado en mi punto de mira. Y creo que ahora debemos dar otro paso más allá. Nuestro objetivo está conseguido, sobre todo desde un punto de vista de la comunicación. Me gusta hablar de una comunicación joven dirigida a espíritus jóvenes. La clave principal es hablar en los mismos códigos, para entendernos, y estar ahí donde están ellos. Con este cometido, la D.O.P. Navarra, por ejemplo, estrenaba en 2009 sus perfiles en las redes sociales o iniciaba una serie de eventos muy ligados al ocio del consumidor y desde entonces se ha mantenido en una constante evolución. Porque, a día de hoy, las cosas van muy rápido y pasan sin darnos cuenta. Esta situación nos lleva a una actualización ininterrumpida. Algo que puede resultar agotador, pero también muy motivante… ¡y rejuvenecedor!", defiende. Con esta base, la actual propuesta cuenta con acciones tan divertidas e interesantes como la que están llevando a cabo para promover el consumo de rosado navarro. "Hasta ahora y desde hace unos años, la promoción de la D.O. siempre ha hecho un guiño al rosado. Hemos dedicado una campaña publicitaria exclusivamente a este vino y hemos realizado eventos concretos en los que teñíamos calles emblemáticas de Pamplona y Tudela de rosa. Pero no es nada nuevo. Si nos remontamos a unos años atrás, incluso Osasuna lució en su camiseta el maravilloso eslogan Rosado de Navarra. Es el vino que pone en el mapa a la Denominación de Origen y lo queremos tratar con mimo y darle el valor que se merece". Arraiza reivindica una categoría para este tipo de vino que no deja de conquistar paladares día a día mientras asegura un futuro prometedor a la D.O.P. Navarra: "Si fuera de otra manera, no hubiera asumido las nuevas responsabilidades que desempeño. Soy de la casa y la conozco para lo bueno y para lo malo. Nuestra Denominación tiene todas las herramientas para seguir afrontando las distintas situaciones que estén por llegar. Muchas ya están superadas, hemos llegado hasta aquí y no somos nuevos. Tenemos que ser capaces de seguir afrontando las adversidades, y para eso hacen falta unidad, trabajo –mucho trabajo– y decisión", confía. Lo tiene claro: el "momento Navarra" está a punto de llegar.