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Un sueño familiar cumplido

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  • Pablo Pedraza
  • 2023-03-01 00:00:00

Se acaban de cumplir 70 años desde la creación de Félix Solís Avantis, siete décadas en las que esta bodega familiar ha logrado una hazaña difícil de imaginar en el momento de su nacimiento: consolidarse como una de las principales multinacionales españolas de elaboración y exportación de vino.


Viajemos hasta 1952. Félix Solís Fernández y su mujer, Leonor Yáñez, compran la Casa del Huerto del Cura, una casona solariega del siglo XVII alegre y colorista estructurada en torno a un patio central con una bodega de tinajas de barro y una nave de barricas en su cueva subterránea. Esa pequeña bodega familiar es el comienzo de la historia de Félix Solís Avantis, uno de los grupos bodegueros más relevantes a nivel mundial y que mantiene una estructura empresarial totalmente familiar a cargo de los hermanos Félix, Pedro, Juan Antonio y Manuel Solís Yáñez, hijos del fundador, a los que se ha sumado ya la tercera generación de la familia con Félix Solís Ramos, hijo de Félix Solís Yáñez, como director comercial internacional.

Los Solís conquistan el mundo
Estamos en 1962. Félix Solís compra una embotelladora en Madrid y lanza Viña Albali. Hasta la capital se traslada el vino en barricas, allí se embotella y se distribuye en bares y restaurantes con un éxito creciente hasta que, en 1968, la D.O. Valdepeñas obliga a que sus productores embotellen sus vinos en origen. La bodega se traslada entonces a su ubicación actual, al pie de la autovía A-4, donde supuso una revolución por inversión, tecnología y volumen.
Llegamos a los años noventa, cuando comienza la espectacular expansión del grupo con la creación de Shanghai Félix Solís Winery en China, a la que seguirían delegaciones propias en República Checa, Francia, Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, Chile, Rusia o México. Paralelamente a este impresionante éxito internacional, la familia cumple su objetivo de situarse en las mejores denominaciones de nuestro país: a Valdepeñas se unió la bodega de La Mancha y, bajo el nombre de Pagos del Rey, pronto llegaron las bodegas en Ribera del Duero, Rueda, Rioja y Toro, que acoge un completo y didáctico Museo del Vino.
En todas ellas, la calidad y la innovación son las señas de identidad que resumen la filosofía que mueve a la familia: "El buen vino debería estar al alcance de todos. Por eso queremos producir vinos de calidad con los mismos valores de nuestro padre". Esas palabras son las directrices con las que han creado un catálogo que supera las 1.500 referencias encabezado por Viña Albali (D.O. Valdepeñas), una de las marcas de vino español con mayor reconocimiento internacional, presente en más de 115 países y cuya calidad está avalada por numerosos concursos internacionales.
Es difícil destacar solo algunos vinos que reflejen el espíritu de la casa entre un muestrario tan amplio, pero merece la pena detenerse en los aromas florales y afrutados de Pulpo, un albariño del Val do Salnés (D.O. Rías Baixas) que se ha convertido en uno de los pilares del proyecto Pagos del Rey. O en el elegante Pago de Fuentecojo, un crianza potente y estructurado que refleja la esencia de la Ribera del Duero. O apreciar los matices de la Verdejo en Rueda a través de Blume o Analivia. O sumergirnos en Rioja con los Arnegui o Castillo de Albai. O dejarnos seducir por la historia de Toro con Bajoz o Sentero. Y así podríamos seguir casi hasta el infinito, porque el inventario bien podría ser un tratado de vinicultura española.
 
Innovación y sostenibilidad
La última apuesta de la familia Solís es su nueva Bodega de Crianza, en la que se han invertido más de 70 millones de euros para levantar un edificio de 18 plantas con 3.355 metros cuadrados de extensión y una altura de 30 metros (40 si incluimos el sótano). Está 100% automatizada y robotizada, desde los procesos de carga y descarga hasta la limpieza y renovación de barricas. Además, reproduce las condiciones óptimas de conservación para las 130.000 barricas de 225 litros (más de 30 millones de litros de vino) que puede acoger. Y en la azotea, 678 módulos de placas solares generan la energía necesaria para el autoconsumo de toda la instalación.
Sin duda, uno de los proyectos más innovadores, sostenibles y eficientes del universo vitivinícola mundial que no es otra cosa que el reflejo del espíritu de la bodega desde su nacimiento hace 70 años: trabajo, crecimiento y superación para ofrecer vinos de calidad en todo el mundo. Tecnología e innovación, por supuesto, pero siempre al servicio de la calidad y la tradición.


Félix Solís Avantis

Autovía del Sur, Km. 199
13300 Valdepeñas (Ciudad Real)

Tel. 926 322 400

www.felixsolisavantis.com

Facebook: @felixsolis.avantis

Twitter: @felixsolisgrupo

Instagram: @felixsolisavantis

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