• Redacción
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• 1998-10-01 00:00:00

Toros, Caballos y Duende

Tres mil años de historia y un cruce de culturas -fenicios, griegos, cartagineses, romanos, godos, árabes y cristianos- han conformado la historia de Jerez, dejando huellas más o menos indelebles, siempre enriquecedoras. Su nombre ya lo dice todo. La Ceret romana derivó, por pronunciación, en la Sherish árabe que los propios musulmanes convertirían en Xerez, y que más tarde los cristianos bautizaron como Jerez. Pero antes de que Alfonso X el Sabio la reconquistara en el S. XIII para el reino de Castilla y, con ella, para el cristianismo, los árabes habían dotado a la ciudad de un significativo trazado urbanístico con sus típicas calles, murallas y torres de carácter defensivo, lo que hoy corresponde al actual casco antiguo.
El año 1492 marcó un hito en el devenir de la ciudad, que vivió un fuerte desarrollo cultural, social y económico a raíz del Descubrimiento de América y la Conquista de Granada. Estos acontecimientos impulsaron la agricultura, el comercio y la siempre omnipresente cultura vinatera, que, no obstante, halló su mayor expansión en el S. XVIII, cuando Jerez consolidó su prosperidad fundamentalmente gracias al reconocimiento mundial de sus vinos. Desde entonces este auge ha ido en aumento, y hoy en día se ha convertido en una de las urbes más florecientes de Andalucía.
Hay muchas formas de adentrarse en Jerez. La ciudad se puede conocer por sus vinos, por su gentes, por sus monumentos y tradiciones. Por los caballos cartujanos y los toros bravos, por sus plazuelas e iglesias, casonas señoriales y principescos palacios; por sus murallas almohades, el alcázar medieval o la antigua mezquita árabe, el arte y la cultura que emana de su riqueza arquitectónica; por el ambiente que se respira en sus terrazas y tabernas, por el talante de sus habitantes, por su sol, sus calles encaladas en blanco, las buganvillas que trepan hacia los balcones o el olor a mosto que transpiran las múltiples bodegas que jalonan la ciudad. Y, por supuesto, por los placeres gastronómicos que nos esperan en las barras de sus bares en forma de reconfortante tapa, o los deliciosos platos de tradición arábigo-andaluza que pueden degustarse en los restaurantes que pueblan esta villa gaditana. Todo esto y mucho más es Jerez. Porque también Jerez es sinónimo de flamenco, de “cante jondo”, de sentimiento gitano. Ese “duende”, esa magia que no tiene traducción pero que simboliza una forma de ser, de percibir, de sentir. Dicen los entendidos que Jerez es la cuna del arte Flamenco, la ciudad que más y mejores “cantaores”, “bailaores” y guitarristas ha dado. Y no es por casualidad que el festival flamenco más importante de España sea “La Fiesta de la Bulería”, baile flamenco típico de esta ciudad, que tiene lugar en Jerez todos los años en el mes de Septiembre. La pasión que los jerezanos sienten por esta manifestación artística queda patente en la Cátedra de Flamencología y Estudios Folklóricos (creada en 1985, con sede en Jerez), y en la existencia del “Centro Andaluz del Flamenco” -un auténtico museo que pretende salvaguardar los valores tradicionales de este arte- enclavado en un palacio del S.XVIII que puede ser visitado.
Además del flamenco, coexisten en Jerez dos manifestaciones que causan auténtico delirio: los toros y los caballos. La afición taurina sobrepasa la mera tradición, convirtiéndose en un rito que se repite año tras año con la celebración de corridas de toros bravos; unas reses que se crían gracias a las famosas ganaderías jerezanas, excelente materia prima para el mantenimiento de la Fiesta Nacional en toda España.
Y junto al toro, el caballo. El genuino caballo andaluz o cartujano, una raza única en el mundo, es el protagonista de fiestas tan singulares como la “Feria del Caballo” y las “Fiestas de Otoño”, que todos los años atraen a miles de turistas dispuestos a admirar la belleza de este noble animal y los enganches enjaezados a la usanza andaluza, todo un derroche de color y fantasía. El alto prestigio de la tradición equina jerezana tiene una de sus más hermosas manifestaciones en la Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, que ofrece un bellísimo espectáculo denominado “Sinfonía a Caballo”; un auténtico ballet equino lleno de plasticidad, en la que la Doma Clásica y la Doma Vaquera ejecutada a la perfección por expertos jinetes se unen a la música en una creación artística rebosante de armonía y color. Pero no seríamos justos ciñéndonos únicamente a la tradición y el tipismo. Jerez hace compatible lo autóctono y lo moderno, el mito y la realidad, el pasado y el presente. Es una ciudad de ayer, de hoy y de siempre, singular e inequívocamente bella.

Aunque la historia y el desarrollo de Jerez está indisolublemente unido al vino, son muchos los atractivos que pueden disfrutarse en esta bella ciudad andaluza, al amparo de un clima complaciente, de inviernos suaves y veranos agradables que se benefician de la influencia del Atlántico. Poco más de 30 km. separan Jerez de la Costa de la Luz. Su inmejorable situación geográfica, entre el mar y la montaña, y su cómoda dotación en infraestructuras viarias, férreas y aeroportuarias, la hacen sumamente accesible al viajero.
Arcos, en la denominada “Ruta de los Pueblos Blancos” es una apetecible propuesta turística: declarado Monumento Histórico-Artístico, se encuentra a tan sólo 30 km. de Jerez. Desde allí se puede llegar hasta la Sierra de Grazalema -conocida por su Pinsapar único en España.
No menos sugerente resulta Sanlúcar de Barrameda a 26 km. de Jerez, conocida por su sabrosa gastronomía, cuya estrella es el afamadísimo langostino. A un paso, navegando por el Guadalquivir, se llega al Paque Natural de Doñana, una de las mayores reservas ecológicas de Europa. Imprescindible apuntarse a una visita guiada.
En plena bahía, a 15 kilómetros de Jerez, se encuentra el Puerto de Santa María, “Ciudad de los Cien Palacios”. Desde allí podemos llegar en barco hasta la milenaria Cádiz, la hermosa “Tacita de Plata”, la ciudad más antigua de Occidente.
Dos rutas más nos esperan: la “Ruta del Atlántico”, que bordea toda la Costa de la Luz, con pueblos hermosísismos de memoria y alma marinera y doradas playas -Conil, Barbate, Zahara de los Atunes, Tarifa...- y la “Ruta del Toro”, por las poblaciones de Medina Sidonia, Alcalá de los Gazules, Los Barrios, Algeciras o San Roque.

La ciudad de las
catedrales del vino

Quien por primera vez visite la ciudad de Jerez y pasee por su calles se verá sorprendido del número de bodegas que encuentra a su paso, edificios generalmente de fachadas pintadas de blanco y albero, el color de la tierra de las plazas de toros. Lo que sorprende no es solamente la cantidad, sino sus enormes dimensiones. Se trata de gigantescas edificaciones de miles de metros cuadrados que, en algunos casos, ocupan manzanas enteras, con su entramado de edificios diferentes y calles propias. Son las “Catedrales del Jerez”, el alma de la ciudad, donde reposan cientos de miles de “botas” del vino más famoso de España.
Desde que los fenicios plantaron las primeras cepas, hacia el siglo X antes de Cristo, Jerez ha tenido siempre en el vino su actividad principal. Durante la dominación árabe de la ciudad, los campesinos consiguieron conservar sus cepas con la disculpa de que elaboraban uvas solo para hacer pasas. Cuando en el 1264 la ciudad fue reconquistada por los cristianos, estos, para diferenciarse de los musulmanes, presumían de comer carne de cerdo y beber vino, lo que facilitó, de paso, el crecimiento de la superficie de viñedo. El gran desarrollo del vino de Jerez ocurrió en tres oleadas. La primera, tras el descubrimiento de América, en que capitales genoveses se instalaron en la zona para exportar vino a las nuevas colonias. La segunda fue a finales del siglo XVII, cuando inversores escoceses e ingleses se afincaron en Jerez e impulsaron decididamente el incipiente comercio exterior. Por ello, muchas de las firmas emblemáticas de los vinos jereznos llevan nombres no españoles. Por último, a mediados del siglo XIX, tras la emancipación de las colonias americanas, muchos empresarios invirtieron allí sus “capitales de regreso”; es en esta época cuando se construyeron las Catedrales del Jerez. Y ahí siguen.
Los jerezanos presumen de ser buenos catadores, y no solo gracias a que muchos de ellos han trabajado o trabajan en las bodegas: les predispone, dicen, el olor a buen vino, a barrica de roble envinada, que se respira por toda la ciudad, abriéndose paso entre los dulces aromas de azahar y jazmín.

Bodegas que se pueden visitar en Jerez
Entre los muchos atractivos de la Ciudad de Jerez están sus bodegas, las mundialmente conocidas “catedrales del vino”, edificios prodigiosos, algunos gigantescos, que sin ayuda de medios mecánicos para acondicionar el aire, consiguen mantener la temperatura del interior al abrigo de las inclemencias del tiempo, sin apenas oscilaciones de temperatura.

1. El Alcázar de Jerez, que albergará el Salón Vinoble, durante los días 23,24 y 25 de Septiembre.

2. Diez Mérito
Diego Fdez. Herrera s/n
11401 Jerez de la Frontera
Tel. 908 37 50 90

3. Pedro Domecq
San Ildefonso, 3
11404 Jerez de la Frontera
Tel. 956 15 15 00 Fax. 956 34 99 66

4. González Byass
Manuel María González,12
11403 Jerez de la Frontera
Tel. 956 35 70 16 Fax. 95633 20 89

5. John Harvey
Arcos 53
11401 Jerez de la Frontera
Tel. 956 15 10 30 Fax. 956 15 10 08

6. Maestro Sierra
Plaza de Silos, 5
11401 Jerez de la Frontera
Tel. 908 54 94 45/ 956 34 24 33

7. Sandemann
Pizarro, 10
11402 Jerez de la Frontera
Tel. 956 30 11 00 Fax. 956 30 35 34

8. Williams & Humbert Ltd.
Nuño de Cañas, 1
11402 Jerez de la Frontera
Tel. 956 34 65 39 Fax. 956 34 70 19

PISTAS PARA DISFRUTAR DE JEREZ
GASTRONOMÍA
PARA COMER BIEN
La Mesa Redonda
Manuel de la Quintana, 3.
Tel.: 956.34.00.69
Cocina de tradición local en un restaurante con una decoración encantadora. Servicio atento, a cargo de sus propietarios, Margarita y José Valdespina. Buena caza en temporada.

El Bosque
Avda. Alcalde Álvaro Domecq, 26. Tel.: 956.30.70.30
En el corazón de la ciudad. Un bello marco para disfrutar de la cocina andaluza de toques atlánticos. Buenas materias primas.

Gaitán
Gaitán 3-5. Tel.: 956.34.58.59
En el centro de Jerez. Todo un clásico. Estupendos guisos en raciones sabrosas y contundentes.

HOTELES
Montecastillo *****
Ctra. de Arcos s/n.
(junto al circuito de velocidad).
Tel.: 956.15.12.00
Edificio de estilo andaluz, con 121 habitaciones y todos los servicios propios de su categoría (piscina, gimnasio, sauna, pista de tenis...), y un campo de golf diseñado por Jack Nicklaus. Excelentes instalaciones.

Guadalete ****
Duque de Abrantes, 50.
Tel.: 956.18.22.88
Moderno hotel, en una zona residencial. Dispone de 125 habitaciones y un funcional centro de congresos y convenciones. Buena infraestructura y servicios, entre los que destaca su agradable piscina.
Royal Sherry Park (****)
Av. Alcalde Álvaro Domecq 11-bis; Tel. 956 303 011
Situado en la avenida de entrada a la ciudad. Un lugar muy acogedor, entre jardines de árboles centenarios. Agradable y cómodo, con un excelente restaurante.

Jerez (****)
Av. Alcalde Álvaro Domecq 35;
Tel. 956 300 600
Recién remodelado, cuenta con unas excelentes instalaciones, incluido piscina y pista de tenis. Con habitaciones cómodas y confortables, está muy bien situado.

Hotel NH Avenida Jerez (***)
Av. Alcalde Álvaro Domecq 10;
Tel. 956 347 411
Fax 956 337 296
Moderno y funcional, con todo el confort y servicios que avalan el prestigio de la cadena NH.

AGENDA DE JEREZ
Todos los domingos por la mañana (excepto verano): Mercado, especie de rastrillo que se celebra en la Alameda Fortún de Torres.

Marzo
Ciclo de Música Antigua.
Semana Santa
De Interés Turístico Nacional. Treinta y una hermandades hacen estación penitencial en el casco antiguo.

Principios de mayo
Feria del Caballo. La fiesta más popular de Jerez, con su paseo de caballos y enganches. Durante una semana se celebran competiciones de acoso y derribo, doma clásica, doma vaquera, raid hípico, concurso de enganches y ganado caballar. De Interés Turístico Internacional.

Septiembre
• Festival Alcazaba Rock.
• Fiesta de la Bulería, típica manifestación de flamenco.
• Fiesta de la Vendimia (coincide con las Fiestas de Otoño).

23 al 25.
Vinoble, el Ier Salón de los Vinos Nobles, Generosos y Licorosos.

24 de Septiembre-9 de Octubre
Fiestas de Otoño. Con la festividad de la Virgen de la Merced (24 de Septiembre) y la de San Dionisio (el 9 de Octubre). Se celebra un ciclo de fiestas de otoño, conmemorando la vendimia y la pisa de la uva, con exposiciones, juegos medievales con lanzas y cañas, carreras de caballos, etc.

Octubre
• Día 11: parada hípica de 1.000 caballos desfilando por la ciudad.
• Día 12: Carrera de caballos en la Plaza del Arenal.
• Del 29 de Octubre al 1 de Noviembre: Torneo de golf Volvo Master, en el Hotel Montecastillo.

OTROS ATRACTIVOS
TURÍSTICOS
Real Escuela Andaluza
de Arte Ecuestre
Avda. Duque de Abrantes, s/n. Tel.: 956.31.11.11
Espectáculo “Cómo bailan los caballos andaluces”. Imprescindible reservar con antelación.

Parque Zoológico y Jardín Botánico
Taxdirt, s/n. Cierra los lunes.

Museo Arqueológico
Municipal
Pza. del Mercado, s/n.
Cierra los lunes.

Museo de los Relojes
Cervantes, s/n. La Atalaya.
Relojes de todas las épocas. Una de las mejores colecciones europeas.

Circuito de Alta Velocidad
Ctra. de Arcos, km. 10
En él se celebran competiciones de automovilismo y motociclismo al más alto nivel internacional.

Centro Andaluz de Flamenco
Palacio Pemartín.
Es el principal centro flamenco de Andalucía. Proyecta audiovisuales a las horas en punto.

TELÉFONOS DE INTERÉS
Información Turística
Larga, 39.
Tel.: 956.33.11.50

Ayuntamiento de Jerez
Tel.: 956.35.93.00

Tele-taxi
Tel.: 956.34.48.60

Ferrocarril. RENFE
Larga, 34.
Tel.: 956.33.48.13

Aeropuerto de Jerez
Tel.: 956.15.00.00