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La revolución del vino mexicano de calidad está en marcha. Cada año crecen más las regiones mexicanas con viñedos y aumenta la calidad de los vinos producidos en México, porque hay territorio (unas 42 mil hectáreas), agua y clima. Las regiones de mayor auge son, en el norte, los valles de Ensenada y de Guadalupe, en Baja California, y en el centro del país, los alrededores de Queretaro. También hay cada día más amantes del vino que buscan productos nacionales para su consumo casero o para acompañar su plato en los restaurantes. Las cartas de vinos reflejan cada vez más la variedad de los vinos finos hechos en México. Los precios de una botella se comparan favorablemente con los vinos extranjeros que se encuentran en los restaurantes.
Existe también una gran cantidad de clubes de vinos (SedeVino, Vino y club, Club del Vino y muchos otros) que organizan catas. Las asociaciones profesionales (como la Asociación Nacional de Vitivinicultores, Asociación Mexicana de Sommeliers, Academia Mexicana del Vino, etc.) animan y estimulan un mejor consumo del vino mexicano fino.
La revolución del vino mexicano de calidad está en marcha. Cada año crecen más las regiones mexicanas con viñedos y aumenta la calidad de los vinos producidos en México, porque hay territorio (unas 42 mil hectáreas), agua y clima. Las regiones de mayor auge son, en el norte, los valles de Ensenada y de Guadalupe, en Baja California, y en el centro del país, los alrededores de Queretaro. También hay cada día más amantes del vino que buscan productos nacionales para su consumo casero o para acompañar su plato en los restaurantes. Las cartas de vinos reflejan cada vez más la variedad de los vinos finos hechos en México. Los precios de una botella se comparan favorablemente con los vinos extranjeros que se encuentran en los restaurantes.
Existe también una gran cantidad de clubes de vinos (SedeVino, Vino y club, Club del Vino y muchos otros) que organizan catas. Las asociaciones profesionales (como la Asociación Nacional de Vitivinicultores, Asociación Mexicana de Sommeliers, Academia Mexicana del Vino, etc.) animan y estimulan un mejor consumo del vino mexicano fino. 
