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La bodega Resero, ubicada en San Rafael, al sur de la provincia, está lista para su reapertura, tras haber permanecido cerrada durante tres años. La firma -que pertenece al grupo Cartellone- reacondicionó sus instalaciones, con una inversión superior a los 35.000 pesos, para poder elaborar cerca de 20 millones de kilogramos de uva. La bodega aplicará en San Rafael el mismo sistema que en San Juan en cuanto a la elaboración: además de trabajar con lo producido por sus propios viñedos, lo hará también con la de unos 350 productores del sur mendocino.
Resero fue creada por la familia Montillam. Alcanzó a ser una de las bodegas más importantes del sur mendocino y llegó a emplear a más de 500 personas para la elaboración de 40 millones de kilogramos de uva.
La reapertura de Resero en San Rafael se da en un clima de incertidumbre ante los cambios operados por la economía argentina, pero con un moderado optimismo acerca de la situación del sector vitivinícola.