- Redacción
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- 2001-10-01 00:00:00
Estancia Piedra Roble 1999
Estancia Piedra.
Un vino digno de beber por la nariz, por su sutil puesta a punto de la madera y admirable frutosidad. Excelente desarrollo en boca, con su tanino maduro y expresivo. Consumo: desde 2001 a 2010.
Estancia Piedra Selección 1999
Estancia Piedra.
Se aprecia la buena calidad de su madera, aunque predomina en estos momentos. Es sabroso, elegante en el paso de boca: solo le falta un poco de tiempo en botella. Consumo: desde 2001 a 2009.
Finca Sobreño 1999
Sobreño.
Fino en nariz, aunque ahora todavía se encuentre dominado por los aromas de vainilla de la madera. La misma tónica en el paladar: elegante paso, tanino bien trabajado con un final muy especiado. Mejorará con algo de crianza en botella. Consumo: desde 2001 a 2005.
Gago 1999
Gago.
Reina el equilibrio en este vino de amplios aromas frutosos y de buena relación con la madera. Es corpulento y sabroso, el alcohol aporta poder, y su tanino, madurez. Consumo: desde 2001 2009.
Gran Bajoz 1999
Viña Bajoz, Coop.
Tiene una preciosa expresión de fruta roja envuelta en un sugerente marco de maderas muy finas, con tonos tostados, canela y pimienta. Es concentrado y goloso, muy bien estructurado y largo. Consumo: desde 2001 a 2012.
Gran Colegiata Barrica 1999
Fariña, S.L.
Sugerente en nariz, con una clara fruta madura, recuerdos tostados que se combinan con tonos balsámicos. Muy redondo y carnoso, bien equilibrado, roble presente pero no exagerado; en fin, un vino encantador. Consumo: desde 2001 a 2004.
Muruve Barrica 1999
Frutos Villar.
Fruta madura, regaliz, y un fondo de mora son algunos de sus atributos en nariz; está bien estructurado aunque es algo secante en el paso de boca. Solo es cuestión de tiempo en botella. Consumo: desde 2001 a 2005.
Numanthia 1999
Vega de Toro.
Un toque genial de maderas exóticas le da los aromas tostados, de raras especias, con la fruta carnosa y expresiva. Concentrado y vigoroso, envuelve el paladar con un tanino jugoso y sensual. Consumo: desde 2001 a 2012.
Peñamonte 1999
Torreduero, S. L.
Equilibrado, destaca la armonía de la fruta y los aromas que aporta la madera. Paladar envolvente, pleno de taninos maduros y un final elegante con un fondo especiado persistente. Consumo: desde 2001 a 2010.
Rejadorada 1999
Rejadorada.
Estupenda la evolución de este vino, los aromas muestran la parte frutal limpia, y los tonos especiados se han fundido para iniciar un incipiente buqué. Está bien estructurado y el tanino le aporta carnosidad. Consumo: desde 2001 a 2009.
Viña San Román 1999
Mauro.
Envuelve la copa con un profundo color picota, sus aromas de frutillos negros, recuerdos tostados, un toque mineral y la lejana presencia de la pimienta. Un tanino suave y maduro cubre el paladar con delicadeza y equilibrio. Consumo: desde 2001 a 2012.
Bajoz Crianza 1998
Viña Bajoz, Coop.
Excelente definición de su incipiente buqué porque la fruta es clara y fragante, con madera avainillada y discreta. Es un poco goloso, se expresa con carnosidad y potencia, y tiene un largo final. Consumo: desde 2001 a 2007.
Camparrón Crianza 1998
Francisco Casas.
Resalta la fruta en el intenso buqué, ciruela negra, algo de mora confitada, también se aprecia su limpia madera. En boca está bien estructurado, con un tanino carnoso y maduro que llena el paladar. Consumo: desde 2001 a 2009.
El Albar de Lurton (Clásico) 98
Belondrade y Lurton.
Impecable color, profundos aromas de frutillos de bosque, especias dulces y un toque de regaliz. Es sabroso, con tanino sugerente y bien trabajado que potencia la carnosidad y da amplitud en el paladar. Consumo: desde 2001 a 2010.
El Albar de Lurton (Excelencia) 98
Belondrade y Lurton.
Posee un delicado toque de madera, ligeramente especiada, con aromas de frutillos negros, claros y profundos. Armonioso en el paladar, envolvente, con taninos maduros y bien estructurado, final amplio y elegante. Consumo: desde 2001 a 2010.