- Redacción
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- 2003-02-01 00:00:00
Juan Jesús Méndez siempre levanta polémica cuando expone sus prácticas vitícolas. ¿Se puede llegar a la calidad por dos caminos diametralmente opuestos? En aquellas islas convive la viticultura más difícil y arcaica con la más moderna de España. Viñedos imposibles como los de La Palma o El Hierro contrastan con la alta tecnología de las plantaciones de Viñátigo en Tenerife. Se sirve de toda clase de ingenios: un software le indica cualquier incidencia en la viñas, radiación solar, detector de humedad, además de los datos convencionales; hasta un “dendrómetro” le indica las contracciones de la cepa… Investiga con clones de variedades canarias, las Gual, Vijariego, Marmajuelo, Tintilla, Baboso, Castellana y, cómo no, la Malvasía. Pero la bodega no es menos original. Un edificio discretamente integrado en el paisaje acoge las uvas para una vinificación meticulosa. Desde aquel viaje al centro de la Tierra, imaginado por J. Verne, surgen 5.000 botellas de este original malvasía.
en el desierto Navarra, tierra de contrastes, contiene un panorama único: la árida y fascinante reserva natural de las Bardenas Reales. A su lado, la viña es de los pocos cultivos que resisten las duras condiciones. Un suelo arcillo-calcáreo poco profundo y pobre, fuertes vientos del cierzo, y pluviosidad escasa. Fernando Barrena y familia así lo entienden, y, adelantados a su época, ya plantaron en sus viñas hace veinte años las variedades francesas que se pondrían de moda mucho tiempo después, Merlot y Cabernet. En aquel ambiente, el rendimiento es ridículo, alrededor de 2.000 kilos por ha. Tan impresionante materia prima era aprovechada por la cooperativa, hasta que hace poco a María, hija de Fernando, se le ocurrió la idea de elaborar su propio vino. El proyecto lo dirige María Barrena, ayudada por Dani Sánchez. Ambos son enólogos muy curtidos, ella con ideas traídas de Borgoña, él con experiencia en Australia. La vieja tradición francesa en coalición con la alta tecnología del nuevo mundo.
Viñátigo Malvasía 2001
B. Viñátigo. Cabo Verde, s/n. La Guancha (Tenerife). Tel. 922 82 87 68
vinatigo@vinatigo.com. D.O. Ycoden-Daute-Isora. Precio: 12 E
Tipo: Blanco dulce. Variedad: Malvasía. Crianza: Dos meses en roble de Allier.
Fecha de entrada: 15/12/2002. Consumo óptimo aproximado: 5 años a 10Ý C.
Puntuación: 8/10
1ª Cata: Un color amarillo dorado, brillante. Es un vino que necesita oxígeno, por lo que en los primeros momentos aparece un poco tímido. Al cabo de un rato surgirá el carácter varietal, los sugestivos aromas de fruta exótica, de membrillo y miel, con ese punto brillante de hierba recién cortada. Muestra una delicadeza en el paladar, una untuosidad prudencial porque resalta más el frescor de su acidez. Recuerdos de uvas pasificadas, especias (canela) y un final levemente amargoso que prolonga el trago.
Seis de Azul y Garanza 2001
Azul y Garanza Bodegas. San Juan, s/n 31310 Carcastillo (Navarra). Tel. 948 82 38 61
info@azulygaranza.com. D.O. Navarra Precio: 12 _
Tipo: Tinto crianza. Variedades: Cabernet Sauvignon y Merlot.
Crianza: Seis meses en barricas de roble nuevas. Fecha de entrada: 3/1/2003
Consumo óptimo aprox: Cinco años a 16Ý C. Puntuación: 8’5/10
1ª Cata: Atractivo, de color rojo picota, todavía algo violáceo, cubierto y muy vivo. Densa sensación de fruta, que recuerda la mora, la grosella o el casis; detrás hay una madera gratificante, excelentemente medida, hace de soporte y aporta notas especiadas. Sabroso y bien equilibrado, de agradable paso, se apodera del paladar un gusto goloso que suaviza el encuentro, y envuelve con su tanino bien marcado, maduro y fino. Escandalosamente joven, tanto en la copa como en su conjunto, lo que le da una gracia especial.