- Diana Fuego
- •
- 2020-12-04 00:00:00
La familia Fernández Roldán ha convertido La Jaraba en un paraíso del agroturismo en el que se elaboran vinos excepcionales. Su última creación, Pago de La Jaraba 2018, ha inaugurado La Mancha Excellent, la nueva clasificación de calidad de la D.O. La Mancha para vinos de alta gama.
E ntre el olvido y la inmortalidad a veces solo hay un valiente de distancia. O una familia con un sueño. El de los Fernández Roldán empezó a gestarse a mediados de los noventa, cuando Gaspar Fernández –industrial de éxito vinculado a la agricultura– adquirió La Jaraba, una finca de unas 1.000 hectáreas en el corazón de La Mancha, entre Villarrobledo (en la provincia de Albacete) y El Provencio (en Cuenca). Aunque el paraje había gozado de muy buena fama por sus extraordinarias condiciones agronómicas y la alta calidad de sus producciones, le hacía falta un impulso para recuperar los productos por los que había sido tan reconocido. La voluntad de lograrlo y el entusiasmo contagioso de la familia Fernández Roldán fueron definitivos para transformar La Jaraba en una explotación agroalimentaria integral formada por una bodega, una quesería manchega y una almazara.
Paisaje en una botella
Sus instalaciones propias amparan las elaboraciones de los cultivos procedentes de las tierras del paraje y el ordeño de su cabaña ganadera de oveja manchega, también situada en la finca: "Elaboraciones que son reflejo del compromiso con el tiempo y las cosas bien hechas", destaca Gaspar Fernández.
La segunda generación familiar, que se incorporó al proyecto con un enorme deseo de mejora y profundos conocimientos técnicos, ha contribuido a que La Jaraba sea reconocida no solo por sus vinos, quesos o aceites, sino también por ser un auténtico paraíso del agroturismo de Castilla-La Mancha. Su filosofía de trabajo se basa en un rigurosísimo control, la excelencia en las materias primas, la economía circular, la sostenibilidad y el máximo aprovechamiento de los recursos naturales. Francisco Fernández –director técnico y máximo exponente de esta segunda generación– y Pedro del Toro –enólogo principal del proyecto desde sus inicios– son el alma de la bodega, y ambos se aseguran de que cada vino que sale de la finca sea representativo de su singularidad: "Nuestra labor es embotellar la historia y el paisaje de La Jaraba en cada añada", señala Del Toro.
Las 92 hectáreas de monte que arropan los viñedos con sus encinas y pinos proporcionan un microclima particular diferenciador que, unido al mayor contenido mineral de los suelos de origen fluvial, contribuye a dar forma a unos vinos intensos y aromáticos, con marcadas notas minerales y aromas balsámicos.
Pioneros de la excelencia
Su última creación, Pago de la Jaraba 2018, inauguró en primavera la nueva clasificación de calidad La Mancha Excellent –impulsada desde la Denominación de Origen La Mancha–, y la bodega lo define como "un fiel reflejo del sueño hecho realidad de los vinos de La Jaraba, quintaesencia del proyecto".
Este vino de terroir, un coupage de Tempranillo, Cabernet Sauvignon y Merlot que ha realizado la fermentación alcohólica en tina de roble francés de 5.000 litros y la maloláctica y la crianza en barrica francesa de primer año durante 10 meses, ha sido "diseñado para el placer", según nos cuenta Francisco Fernández. "En él disfrutamos de un color rojo picota madura de intensidad media-alta con vivos ribetes, con aromas a frutos rojos y fruta negra, sutiles matices de especias y delicado toffee, con una boca amplia, carnosa y equilibrada", subraya.
Sin duda es un atractivo y digno representante de La Mancha Excellent, categoría que incluye solo a aquellos vinos de alta gama y máximo nivel de excelencia "que contribuyen a prestigiar la vitivinicultura castellano-manchega, sujetos a exigentes controles, rigurosísima trazabilidad, limitados en cantidad a un máximo del 2% sobre el total del vino declarado por la D.O. y que en ningún caso pueden superar las 50.000 botellas por referencia o marca", como explican desde la bodega.
Pago de La Jaraba 2018 fue el primer vino en lucir ese precinto especial destinado a los más excepcionales de la Denominación: La Mancha Excellent. Para Ramiro Martínez, director comercial de La Jaraba desde hace más de 15 años, este último año ha sido clave para el proyecto, con tres hitos históricos: "Por un lado, el reconocimiento de La Jaraba D.O.P. como Vino de Pago y la certificación IFS que acredita a nivel internacional la calidad y seguridad alimentaria de nuestros productos; y por otro, ser la primera bodega en comercializar un vino La Mancha Excellent".
Pago de La Jaraba
Ctra. Nacional 310, Km. 142,7. 02600 Villarrobledo (Albacete)
www.lajaraba.com
Tel. 967 138 250