- Diana Fuego
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- 2021-12-01 00:00:00
El lado más arriesgado y curioso de la bodega riojana se plasma en los Ensayos Capitales, que se asoman al precipicio de la innovación con su carácter retador e irrepetible. El último de ellos es un Tempranillo de altura 'asoleao' que sale en enero.
La llamada de un proyecto provocador y muy singular nos ha atraído hasta Quel, allí donde Baco tuvo más templos que en Grecia –como escribió el dramaturgo riojano Manuel Bretón de los Herreros–. Los Ensayos Capitales de Queirón son una mirada al futuro desde la tradición y el clasicismo, "un desafío en el límite, situados en el precipicio de la innovación", como los definen desde la bodega. "Cada vino de Queirón tiene en sí mismo un componente de ensayo, pero estos nos hacen llevar al extremo nuestro conocimiento y nuestras experiencias como viticultores y bodegueros", apunta Rubén Pérez Cuevas, su enólogo.
Efímeros, divertidos y arriesgados, estos ensayos de investigación se producen en ediciones limitadas que, una vez se agotan, no se vuelven a encontrar. Pérez Cuevas, que vive y siente el vino como un arte, nos habla de Ensayos Capitales Nº3, el último gran reto, un monovarietal de Tempranillo de altura que verá la luz a mediados de enero y que incorpora en su elaboración la ancestral técnica del asoleo de las uvas: "Queríamos unir el vino de Quel a una tradición que se hunde en la memoria de nuestro pueblo. Fusionar la técnica de la maduración de las ciruelas con el mundo del vino. La práctica del asoleo es muy antigua en la enología y creemos que es muy bonito traerla a Rioja con un concepto en el que se dan la mano la tradición y la innovación".
"Ensayos" irrepetibles
Sus antecesores, Ensayos Capitales Nº1 y Ensayos Capitales Nº2, también son fruto de esa búsqueda de la originalidad que navega entre la innovación y la reinterpretación de la tradición. El primero de la gama, un monovarietal de Graciano –una variedad minoritaria en Rioja que históricamente se ha utilizado en coupages por su interesante acidez– sin sulfitos, fue un ensayo de viticultura y también de enología: "La he trabajado mucho, la he disfrutado en el campo por lo exigente que es, por su madurez tan compleja, y guardaba un deseo íntimo y muy personal de otorgarle el protagonismo que se merece. Es, a pesar de los años que lleva en Rioja, una gran desconocida. Su potencia aromática es muy sugestiva, pero necesita que se entienda muy bien. Ese era mi reto. Además, en nuestros viñedos de altura de la zona de Quel se expresa con una elegancia y una finura estremecedora", cuenta el enólogo de Queirón.
Pero este vino sin sulfitos –una declaración de intenciones de la bodega, que apuesta por vinos cada vez más naturales– también supuso un grandísimo reto enológico, con fermentaciones paralelas, y tan especial que ya no es posible encontrarlo: "Son vinos que nacen y mueren con ellos mismos, pero que abren un camino, que configuran la línea más innovadora de nuestra bodega".
Ensayos Capitales Nº2 es otro de sus retadores experimentos, elegante y voluminoso. La singular crianza de este Tempranillo Blanco de La Rioja mas recóndita –su fermentación comienza en depósitos de acero inoxidable en contacto con sus pieles y, tras la malolática en barricas con sus lías, termina su crianza en tinajas de barro– nos muestra un lado de la uva menos poderoso aromáticamente, pero con una sutileza extraordinaria: "Nos pareció muy interesante que con un buen trabajo de enología se podía conseguir dar la vuelta a la variedad, en este vino queríamos una largura mayor", señalan desde Queirón.
Un Tempranillo único
Con el Ensayos Capitales Nº3 han buscado la concentración máxima de las sensaciones del vino en la boca y, para lograrlo, se han inspirado en la tradición queleña de la pasificación de las ciruelas claudias: "En Quel, el asoleo lo realizamos sobre cañizos antiguos que se emplean para pasificar las ciruelas. Extendemos los racimos de forma muy cuidadosa tras la vendimia manual, y cada día les damos la vuelta para que la incidencia de los rayos de sol sobre los granos de uva sea lo más homogénea posible", comenta Rubén Pérez Cuevas. Este sorprendente vino se elabora con uvas de una viña concreta de La Pasada que se sitúa en la zona de límite de cultivo, en lo alto de las laderas del Monte Yerga, "un Tempranillo que se cocina a fuego lento porque el ciclo es mayor" y al que dotan de mayor profundidad con el asoleo. Su emocionante complejidad, con notas de frutas negras muy maduras y una frescura explosiva, es un desafío efímero que continuará con el misterioso Ensayos Capitales Nº4.
Queirón
Bodega Nº 9 del Barrio de Bodegas de Quel
26570 Quel (La Rioja)
www.queiron.es / Tel. 941 234 200