- Laura López Altares, Antonio Candelas, Foto: Patricia / AdobeStock
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- 2024-07-18 00:00:00
"Al ritmo de las olas y de padre pescador ha nacido un manjar de exquisito sabor", escribe Manuel Ibáñez Monferrer en la página web de la Asociación Gastronómica Fideuà de Gandia. Este icono del recetario levantino debe su existencia a un olvido en el Mediterráneo que puso en juego –y en el fuego– unos 'fideos' muy peculiares...
A veces –no pocas– es el descuido el que cuenta, la grieta fortuita por donde se cuela la genialidad. Y la historia de la gastronomía está llena de sabrosos accidentes culinarios que la reescribieron a través de elaboraciones inesperadas. Como el yogur, los polos, el brownie, la tarta Tatin, las patatas chips, los copos de maíz, la Nutella... o la fideuà.
Según la versión de la Asociación Gastronómica Fideuà de Gandia, este emblemático plato mediterráneo nació entre 1912 y 1914 a bordo de una de esas barcas de arrastre que zarpaban a faenar de madrugada desde el Grau de Gandia.
"En una de estas barcas, la Santa Isabel, aconteció que, llegado el momento de preparar la comida, el cocinero, ese día, quiso deleitar al resto de la marinería con sus dotes culinarias, preparando una fantástica paella de marisco". Aunque nos resulta un poco inverosímil pensar que aquel audaz chef tuviera los medios para preparar semejante festín en alta mar, desde la asociación que custodia y reivindica la fideuà afirman que se puso a "sofreír las gambas y cigalas con el resto del pescado, el tomate troceado, los ajos, la cebolla y un poco de pimentón con buen aceite de oliva" cuando se dio cuenta de que no quedaba arroz en la despensa. Como ingeniosa solución, se le ocurrió trocear unos espaguetis y cocinar los fideos como si fueran arroz: "Dejó secar el fideo ya cocido como si fuese la paella de marisco normal que se había propuesto realizar, y se dispuso a servirlo a sus compañeros".
Bien empapados del sabrosísimo caldo y danzando sobre el fuego, aquellos fideos primigenios casi piratas dieron vida a una nueva receta que se convertiría en leyenda culinaria levantina a la velocidad de la luz. Todavía hoy, la fideuà original se prepara con cigalas, gambas, rape, ajos, tomate, pimentón, cebolla, azafrán, aceite, caldo de pescado y, lo más importante: ¡fideos del nº4!
Neros Rosé 2023
Bodegas Valdesneros
www.bodegasvaldesneros.com
D.O.P Arlanza
Tempranillo, Garnacha, Mencía
Hemos apostado por dos opciones rosadas, pero muy diferentes entre sí. Este, de la pequeña D.O.P. Arlanza, ha sido todo un descubrimiento por su perfil tradicional repleto de energía y matices frutales, pero sin caer en banalidades. Encaja con el bocado veraniego a la perfección por su frescura, amabilidad, sensación sabrosa y porque despliega una gran gama de recuerdos (fresón, cereza, melocotón...)
Alegra de Beronia 2022
Bodegas Beronia
www.beronia.es
D.O.Ca. Rioja
65% Garnacha, 35% Tempranillo
Creemos que un rosado más elegante y sutil no se entendería con el sabor de la fideuá, pero esta maravilla riojana parece haber sido creada con esa intención. Delicadeza, pero sin renunciar a los matices frutales, de cítricos (pomelo) y una textura completamente seductora. Lo mejor es la sensación de volumen que despliega y lo bien equilibrada que está gracias a su frescura. El final floral es una locura.
Finca San Blas Blanco 2020
Finca San Blas
www.fincasanblas.com
D.O.P. Utiel-Requena
Merseguera, Chardonnay
Era casi una obligación contar con un blanco de perfil mediterráneo y algo más. Lo hemos hallado en esta pareja varietal cuyos matices de flores blancas, fruta (paraguayo, melocotón) y una parte ahumada sutil y precisa nos indican que nada puede salir mal cuando entremos en faena. La boca es envolvente, tan sabrosa como el bocado y con una sensación mineral que nos sugiere frescura más allá de la acidez.
Arboledilla Levante
Barbadillo
www.barbadillo.com
D.O.P. Manzanilla de Sanlúcar
Palomino
Otro de los imprescindibles tenía que ser una manzanilla con mayúsculas, y esta cumple a la perfección con lo que íbamos buscando. El carácter del velo de flor en una elaboración en rama con una crianza de unos seis años. Fina, sápida, delicada y con todos los matices característicos que no solo acompañan, sino que engrandecen el conjunto. Hay diferentes formas de afrontar una fideuà, y esta es muy top.