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El año 2016 es el año de Cervantes. Se conmemora el IV centenario de la muerte del autor del Quijote y esta es la razón por la que todo lo que tenga que ver con la historia o la cultura de nuestro país durante este año suene a hidalgo caballero. Entre los muchos rumores o mitos que se relacionan con Don Miguel de Cervantes, se comentaba que era buen comedor y bebedor, quizá por ello se justifique que el Quijote esté lleno de referencias culinarias. Para mí es no el primero, porque este fue la Biblia, pero sí uno de los primeros libros de gastronomía y vino. Por eso, y porque en nuestra redacción estamos rodeados de manchegos, hemos decidido rendir también nuestro pequeño homenaje a Cervantes dedicándole la portada de la revista, la cata de vinos, los vinos jóvenes de la D.O. La Mancha. Y digo yo… que si don Miguel levantara la cabeza se quedaría impactado con la gran cantidad de vinos que hay hoy en día en su tierra; y, no solo por eso, también por su calidad, considerados muchos de ellos entre los mejores del mundo.
Nos gusta viajar en MiVino-Vinum. Por eso dejamos atrás las tierras manchegas para adentrarnos en las bellas Rías Baixas y de ahí nos recorremos España, Italia, Alemania, Suiza… para retar al vértigo trepando por los viñedos inclinados. Este mes, nos acercamos también a Cuenca, al complejo enoturístico de Finca la Estacada, para liberarnos del estrés y nos hemos animado a indagar y catar el hoy en día casi casi gran olvidado, el brandy.
Espero que durante estos últimos días de cálida primavera y primeros del verano no nos ocurra como a Quijote y Sancho: “Mas sucedióles otra desgracia, que Sancho tuvo por la peor de todas, y fue que no tenían vino que beber”. (Parte I, Cap. XIX) ¡Feliz lectura!
