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Como cada septiembre, legiones de vendimiadores, con sus tijeras bien afiladas, se preparan para abordar pacíficamente las viñas de toda España. Agacharse y volverse a agachar para cosechar el esfuerzo y dedicación que el hombre de viña ha ido depositando en ellas durante todo el año es el objetivo. Una faena laboriosa que pone a prueba el valor del agricultor cada vez que se aproxima un periodo de escasez de lluvias, cuando existe la probabilidad de que la cuchilla afilada del repentino granizo haga de las suyas o en el caso de que suceda cualquier otra desdicha a la que puede ser sometida la inocente vid sin previo aviso. Septiembre es el mes en el que el viticultor hace entrega al bodeguero de sus proyectos para que este los haga realidad tras el milagro de la fermentación. Es un mes de fiestas de pueblo, de regreso a las clases y de retomar la rutina diaria con más o menos síndrome posvacacional. En MiVino nos hemos sacudido este mal con unos vinos muy especiales que han sido criados en tinajas de barro, depósitos de hormigón, recipientes de vidrio o acero inoxidable. Nos damos un garbeo por Madrid para conocer El Molar, reciente cuarta subzona de su D.O. y descubrimos algunos de los vermuts de bodega más interesantes que se elaboran en España. Además, hemos dado la bienvenida a la 10ª Edición de la Guía del Vino Cotidiano, que ya está en la calle y, cómo no, hemos puesto orden en los excesos del verano gracias a la Dieta Mediterránea, en la que por supuesto aparece el vino. No tengáis miedo a que la hoja del calendario de agosto caiga. Llega el mes de la recolección de sueños. Depositadlos en el lagar de la vida cotidiana donde se irán haciendo realidad a lo largo del curso.