- Redacción
- •
- 2001-11-01 00:00:00
La Unión Española de Catadores -la UEC- se ha lanzado, después de más de 15 años de andadura, a editar un “texto” propio que servirá como base de los cursos de cata que imparte el grupo y como información general para profesionales y aficionados. El libro, publicado por la Editorial Agrícola Española y auspiciado por la Fundación para la Cultura del Vino, lleva un título bien definitorio: Análisis sensorial y cata de los Vinos de España.
Es una obra coral, multidisciplinar, que ha buscado reunir conocimientos de especialistas bien diversos, desde la enología hasta el consumo. Es también el reflejo de la movilidad, de la actividad del sector del vino, las nuevas prácticas y teorías, sus hacedores y los nuevos gustos de quienes lo disfrutan. Y así a los capítulos referidos a los sentidos y las bases y el protocolo de la cata se suman detallados recorridos por la diversidad de las uvas y vinos de España, además de puntillosas disertaciones sobre el color o sobre vinos especiales, los espumosos o los generosos andaluces. Es una pena que la imagen de las copas de portada no haga honor ni al vino ni al contenido.
Diccionario del Vino
La Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León editó un concienzudo estudio de Ubaldo de Casanova Todolí en forma de Diccionario del Vino de Castilla y León. El autor, profesional de la prensa y profesor universitario de Historia moderna, contó con la colaboración de un especialista en el sector del vino, Pascual Herrera. La obra reúne casi 2.000 términos, generales, localismos y nombres propios de vinos y bodegas de la región.
Diccionari del Vi
De otra región, de Cataluña y para catalanoparlantes, nació el Diccionari del Vi, de Xavier Rull, editado por uno de los templos del conocimiento del vino en este país, la Universidad tarraconense Rovira i Virgili. Compendia 2.700 entradas, con definición enciclopédica de términos históricos y modernos y equivalencia al castellano, francés e inglés. Un texto clave para estudiantes y estudiosos.
Cómo quiero que me sirvan el vino
Por el contrario, la obra de Arturo Pardos, “Cómo quiero que me sirvan el vino”, se dirige, en general, a los sufridos aficionados al bien beber, entre los que él mismo se cuenta. Está publicado en Alianza, y es un alegato, tan puntilloso como el autor nos tiene acostumbrados, sobre los derechos del bebedor y las infamias de quienes atentan contra ellos. Es un vademecum sobre el fondo y la forma del servicio del vino, sobre todo en el restaurante. Un análisis, preñado de ironía y humor, sobre los errores reiterados que destrozan la calidad de una botella y los nervios del cliente. Y una lección teórico práctica sobre la actuación correcta en cada instante y cada detalle del servicio, tan útil para los profesionales de la hostelería como para quienes invierten parte de su tiempo y su economía en disfrutar de la mesa y de la copa. Con conocimiento.