Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).
Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.
Nos hacemos eco de algunas de las novedades que han empezado a comercializarse en los últimos días: nuevas añadas, dulces de alta gama y nuevos vinos de fusión. La firma malagueña López Hermanos acaba de presentar dos vinos dulces de extraordinaria finura. Vinos elaborados con uvas Moscatel y Pedro Ximénez, respectivamente, que por su escasez y cualidades organolépticas merecen la consideración de “reservas de familia”. Con estos dos elegantes vinos, López Hermanos, que ya disfruta del éxito obtenido con sus moscateles Cartojal y Tres Leones, completa la gama de vinos dulces de calidad. La añada 2001 del Gran Feudo Blanco Chardonnay, de Bodegas Julián Chivite, ya está en el mercado y se presenta con una imagen mejorada. Este vino se ha elaborado a partir de una selección de las mejores uvas Chardonnay procedentes de los viñedos que la firma navarra tiene en la finca “La Planilla”, en Marcilla. Un blanco de aroma fresco y afrutado, y un paladar vivaz, muy frutoso y con equilibrada acidez. Completa esta sección de novedades el nuevo vino de Bodegas Pirineos: Marboré 99. Este vino aporta la fusión perfecta de variedades europeas (Merlot, Cabernet Sauvignon) que tan bien se han adaptado al suelo de Somontano, junto con otras autóctonas como la Moristel y la Parraleta, además de la versátil Tempranillo. Un tinto con toda la finura y la elegancia que caracterizan a los vinos europeos más atlánticos.