Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).
Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.
El territorio manchego siempre tiene reservada una sorpresa al que lo visita. Pasada la albaceteña localidad de La Roda se queda atrás la llanura para introducirnos en un paisaje de monte mediterráneo donde las encinas comienzan a salpicar un suelo con mayor relieve. Justo allí se encuentra la Bodega Dehesa de Luna, un proyecto joven con un futuro sensacional. Es más, hoy entre sus elaboraciones ya se encuentran vinos de una notable calidad. El ideario que se fijó desde el principio estaba definido por una sola palabra: respeto. Y este respeto por el medio, la naturaleza y la diversidad de la finca se unió al trabajo riguroso de investigación y la innovación. La integración de todo ello está dando unos resultados magníficos que poco a poco irán enseñándonos el verdadero potencial vitícola de la Finca. Una finca de un gran valor ambiental y ornitológico que en sus casi 3.000 hectáreas alberga tres viñedos. El de última plantación, denominado La Cañada del Navajo, consta de 12 hectáreas y es una lección de viticultura en estado puro. Las seis variedades plantadas se trabajan hasta en cuatro sistemas de conducción y diferentes densidades de plantación para sacar lo mejor de cada una de las variedades en las condiciones climáticas que se dan en la finca. Sin duda uno de los viñedos más complejos de nuestro país. En su línea de vinos destaca sin lugar a dudas el monovarietal de Graciano: fresco, armonioso, bien armado por su estructura y sin ningún tipo de aristas. Más información: www.dehesadeluna.com
