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Todo llega si el trabajo es serio, metódico y constante. Por ello, como no podía ser de otra forma, se celebró el trigésimo aniversario de la fundación de la Unión Española de Catadores. Y el 18 de noviembre se celebró por todo lo alto este acontecimiento. La UEC, como se conoce popularmente, preparó una histórica cata en el hotel Villa Real de Madrid. Siete socios presentaron a otras tantas bodegas y cataron sus vinos más sobresalientes al alimón. José Hidalgo trajo a Marisol Bueno, de Pazo de Señorans. Guillermo Cruz a, Mª Jose Lopez de Heredia de Viña Tondonia. Custodio López Zamarra aportó el mito de Vega Sicilia y su enólogo, Gonzalo Iturriaga, lo explicó. Pedro Ballesteros presentó al Reserva Real, de Miguel Torres. Fernando Gurucharri, expuso el Priorat de Álvaro Palacios. Ignacio de Miguel habló del vino de Carlos Falcó y Bartolomé Sánchez, presidente honorífico de esta revista, demostró que la magia se puede beber con el Palo Cortado de Añada 1987, de González Byass, y también se puede oír, con las mágicas palabras de Antonio Flores. Catorce apasionados del vino, para ofrecer una noche extraordinaria de historias alrededor de vinos impresionantes, como fin de fiesta se disfrutó de una cena de gala en los salones del Hotel Úrban de Madrid. Más información: www.uec.es
