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Director de Sisling e inventor de un sistema
acelerador de la crianza en botella.
Llega un invento revolucionario. Se trata de un acelerador que controla la crianza en botella o en barrica mediante un sistema que imita los cambios atmosféricos y es capaz de crear en un vino sometido a ocho días de presión-depresión el mismo efecto que si hubiera estado ocho años sometido a crianza. Y en destilados rudos, la ganancia de suavidad es increíble. Los productos finales son más estables y más aromáticos que el original. Su inventor es José Luis Godoy, director de Sisling, un empresa dedicada a la industria del corcho.
Godoy ha buscado respuestas al fenómeno natural de la evolución y envejecimiento en vinos y destilados. Sabemos que el paso del tiempo afina el tacto, sobre todo del alcohol, y mejora las cualidades aromáticas. Los ensayos han corroborado que los gases atmosféricos, principalmente el oxígeno, son los responsables de la evolución y el envejecimiento. Este fenómeno se produce de forma natural con las presiones atmosféricas, que mueven el gas en dos sentidos: depresión y presión.
Cuando se simula una borrasca, en la depresión se produce un vacío en los líquidos a través de los poros de las barricas o corchos (ambos permeables por los gases). Y con posterioridad, cuando se reproduce un anticiclón, ocurre una presión positiva produciendo un efecto de penetración de los gases en las porosidades. Aquí es donde el oxígeno atmosférico reacciona con el líquido y se consume, provocando el efecto de envejecimiento, que puede durar años. La descompensación de gases en el líquido original necesita renovarse mediante sucesivos cambios atmosféricos.