• Redacción
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• 2001-02-01 00:00:00

Nunca fue tan elevada la demanda de burdeos de precio asequible, al menos si nos basamos en las numerosas preguntas de los lectores en ese sentido. Y es que, ¿quién se va a permitir un Grand cru ante la política de precios de los Châteaux más destacados?
Pero, ¿dónde encontrar posibilidades al alcance del bolsillo? Casi todos los burdeos han registrado subidas de precios, incluidos por ejemplo los Crus bourgeois del Médoc o los satélites de Saint-Emilion, y hasta los Fronsac, que durante mucho tiempo fueron el principal consejo confidencial, ya no resultan tan económicos como antes. Hemos hallado lo que buscábamos en la región de las Graves, al sur de Burdeos. La cuna del burdeos tuvo que luchar con algunas dificultades desde que, a mediados de la década de 1980, se separaron los municipios próximos a la ciudad, que desde entonces comercializan sus vinos como «Pessac-Léognan». Esto hizo que los Graves originales perdieran de un golpe sus locomotoras, los Crus classés, por lo que se sumieron en un letargo durante años. Ahora, esto parece haber cambiado abruptamente. La cata de los principales vinos de la región, organizada por la asociación local de vinicultores, que recogió las muestras para nosotros, ofreció muchos productos recomendables. Por eso no queremos que se pierdan ustedes los resultados, aunque no todos estos vinos estén disponibles fuera de Francia. Sin embargo, puede que el buen resultado de los «Graves» anime a algún comerciante valiente a considerar la región.
Barbara Schroeder y Rolf Bichsel realizaron para esta guía una cata ciega de unos 70 tintos y blancos de los años 1998 y 1999.

tintos 1998
La región de las Graves («pedregales») se extiende desde los límites de la ciudad de Burdeos hasta unos 50 kilómetros hacia el sur, rodeando las zonas de vinos dulces de Sauternes y Barsac. Por el este, las Graves limitan con el río Garona, y por el sur con los bosques de pinos silvestres de la zona. Los suelos, similares a los del Médoc, son de grava con inclusiones de arena y arcilla. El Cabernet Sauvignon da aquí muy buenos resultados. Se puede distinguir entre dos estilos de Graves tintos: por un lado se ofrecen vinos afrutados para su consumo en joven, y por otro lado, productos con un significativo potencial de maduración.

Château La Fleur Jonquet
14,5 De carácter marcado, por lo que no gustará a todo el mundo: vigoroso, áspero, especiado. 2003 a 2010. ll
Château Beauregard Ducasse
Cuvée Albert Duran
14,5 Para una comida sólida: compacto y robusto, taninos ásperos. 2002 a 2004.
Château Les Clauzots
14,5 Vino afrutado con un registro muy agradable. 2001 a 2004.
Château Graveyron
14,5 Diseño muy moderno, con mucho roble. 2001 a 2004.
Château Tour de Calens
Elevé en fûts de chêne
14,5 Vino robusto marcado por los taninos, de consistencia media, que aún debe madurar tres o cuatro años, tras lo cual acompañará muy bien toda clase de platos recios. 2004 a 2008.
Château Cazebonne
14,5 Un vino que sienta bien, de estilo tradicional y áspero, perfecto para una comida sustanciosa. 2002 a 2006.
Château Rahoul
14,5 Buena crianza, nota limpia de barrica, aunque el final es ligeramente seco y quebradizo. En cualquier caso, presenta una cierta elegancia y puede mejorar con la maduración. 2003 a 2006. lll
Château Le Bourdillot
Cuvée Prestige
15 Un vino que sienta bien: nariz vigorosa y especiada, jugoso y frutal en boca. 2002 a 2006.
Vieux Château Gaubert
15 Buen vino para la gastronomía: nariz muy civilizada de Merlot y barrica, hecha para gustar; pleno y abundante en boca, jugoso. 2001 a 2005. lll
Château Magneau
15 Vino robusto y fiable: especialmente apto para platos recios y especiados. 2002 a 2010.
Château Camus
15 Un vino perfecto para los amantes de los tintos afrutados con aromas de bayas rojas maduras: jugoso, agradable, bien estructurado y rico. 2001 a 2004.
Château Coste de Mons
15 Factura muy moderna con sus discretas notas de barrica y sus taninos suaves. 2001 a 2006.
Château de Respide
Cuvée Calliphyge
15,5 La madera y la fruta se funden perfectamente, los taninos resultan cuidados, y tampoco le falta el cuerpo necesario para una larga vida. 2002 a 2008.
Château de Landiras
16 Sorprendente riqueza de aromas, grosella, yodo, un soplo de regaliz; anguloso y robusto, jugoso y denso, abundantes taninos ásperos, final especiado. 2004 a 2015.
Château du Grand Bos
16 Tiene garra y carácter: posee abundantes taninos maduros pero ásperos y frescos; es como morder una uva madura. Pleno y largo en boca, robusto y denso, lleno de carácter. Frutosidad jugosa. 2002 a 2010. lll
Clos Floridène
16 La nariz más recatada de todos los tintos, pero precisamente por eso muy prometedor, con notas de regaliz, yodo y bayas del bosque una vez aireado; compacto en boca, con taninos que en esta etapa resultan muy juveniles, ásperos pero no agresivos, y un toque de amargor al final; un vino agradable aún cerrado, que tiene todo lo necesario para resultar elegante pero necesita aire… y tiempo. 2005 a 2020. ll
blancos 1999
El potencial de los Graves blancos no siempre se aprovecha plenamente, y la crisis de los burdeos blancos no ayuda a mejorar la situación. Es una pena, porque ¿en qué otro lugar pueden elaborarse grandes blancos secos con la uva Sémillon?
Château Brondelle
14,5 Para apagar la sed o tomar con ostras: cosquilleantemente fresco, finamente perfilado, esbelto, sienta bien. 2001 a 2002. ll
Château Lamoignon
14,5 Frutal, suave, delicadamente amargo. 2003 a 2008.
Château Les Clauzots
14,5 Un vino sin complicaciones para calmar la sed; agradable de beber, refrescante. 2001.
Château Beauregard Ducasse
Cuvée Albertine Peyri 1998
14,5 Algo desequilibrado, aunque con buenos planteamientos, madera bien integrada, fruta perceptible, acidez. 2001 a 2005.
Château de Landiras
14,5 Agradablemente especiado, buena acidez, final algo seco. Debería madurar 2 ó 3 años. 2002 a 2008.
Vieux Château Gaubert
15 Recomendable, a pesar del predominio de la madera: fresco en boca, especiado, bastante largo, claras notas de roble. 2001 a 2004. lll
Château de la Gravelière
15 Graves típico de estilo clásico: agradablemente especiado, buena estructura, madurará bien. 2003 a 2010.
Château La Croix 1998
15 Aromas herbáceos; bien perfilado en boca, posee extracto y acidez; puede madurar. 2003 a 2008.
Château Mayne du Cros
Vinifié et élevé en fûts de chêne
15 Estructura y densidad buenas: vigoroso en boca, buena frutosidad, crianza bien conseguida. 2002 a 2008.
Château Brondelle
Cuvée Anaïs
15,5 Maderas perfectamente equilibradas, jugoso y pleno en boca, acidez no demasiado marcada. 2002 a 2006.
Château Tourteau Chollet
16 Vino sorprendente, un auténtico descubrimiento: posee nervio y temperamento. Recatado pero prometedor, con menta y melocotón rosado; vigoroso y pleno en boca, estructura robusta. 2002 a 2010.
Château Rahoul 1998
16 Uno de los mejores blancos de las Graves: nariz seductora marcada por la madera, notas florales; elegancia y casta en boca, muy buena acidez que le da jugosidad, final cítrico largo e impresionante. 2002 a 2008.
Clos Floridène 1998
16 Recuerdos de hierbas silvestres (Sémillon), un toque de boj; con casta y carácter compacto, el final es muy largo con notas agradables ligeramente amargas de albaricoque y melocotón. Un ejemplo. 2004 a 2010. ll