• Redacción
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• 2005-12-01 00:00:00

Inesperados, insólitos, inéditos, los nuevos prioratos maravillan allá donde se presentan. Pero su Renacimiento es relativamente reciente, la primera cosecha de los «nuevos» prioratos apareció en 1989. Esa fecha quedará marcada para siempre como el año del gran cambio en el modo de laborar, beber y pensar el vino en aquella comarca. Porque en sus históricas montañas de pura pizarra la industria del vino agonizaba, y las viejas garnachas y cariñenas apenas sostenían una viticultura destinada a la economía doméstica. Muy pocos sospechaban que aquella revolución iba a suponer algo más que el capricho temporal de un grupo de soñadores. René Barbier, descendiente de varias generaciones dedicadas al vino, fue el propulsor del movimiento al que pronto se sumaron significados personajes, ilusionados con aquel proyecto novedoso: Carles Pastrana, Álvaro Palacios, Dafne Glorian, Josep Lluis Pérez, todos ahora famosos elaboradores, y alguno más, fueron los que se aventuraron con los riesgos. La pequeña localidad de Gratallops acogió la bodega donde se elaboró el primer vino, alrededor de 10.000 botellas. Pero los espíritus aventureros no suelen tolerar que se corte su libertad de decisión, y la unión apenas duró una cosecha. En realidad, ni la primera, pues cada integrante acabó vendiendo las botellas que le correspondieron con su nombre y marca particular. Pero la aventura y el espíritu que la impulsó siguió su curso. ¿Y qué fue de aquel vino primero, capaz de encender una tea de tamaña luminaria? Sabido es que a la excelente variedad Garnacha le cuelgan todos los sambenitos posibles, incluso la ineptitud de algunos a la hora de tratarla. Uno de los más sostenidos es que sus vinos no son capaces de soportar el paso del tiempo dignamente. Decididos a averiguarlo, hemos catado uno de aquella primera cosecha, el Clos Mogador de René Barbier. El vino, contra todo pronóstico, está todavía muy vivo, guarda un buqué espléndido y un gran equilibrio. Lo que demuestra que, transcurridos apenas quince años desde aquel Renacimiento, los nuevos Priorat están hechos para ser conservados largamente, como los grandes vinos del mundo. (bartolome.sanchez@vinum.info) Clos Mogador 1989 Clos Mogador. Camí Manyetes, s/n. 43737 Gratallops (Tarragona) Tel. 977 83 91 71 closmogador@terra.es Tipo de vino: tinto con crianza. Grado alcohólico: 12,5. Cepage: Garnacha, Cariñena, Cabernet, Merlot. D.O.: Priorat qualificat. Crianza: un año en barricas de roble. Consumo: medio plazo. Temperatura de servicio: 18º C. Puntuación: 9/10 Color rojo cereza con bastante tono teja. Todavía aparece su buqué escondido, porque este vino cuando joven ya tenía sus manías y reducciones notables. Al principio parece algo desvaído de aromas aunque a los diez minutos su raza le hace venirse arriba con fuerza y complejidad. En el paladar es delicado, sedoso, muy bien equilibrado y mantiene la firmeza hasta el final.