- Ana Lorente
- •
- 2019-01-31 00:00:00
C onviene explicar paso a paso esa etiqueta. Peñafalcón es el antiguo nombre de Peñafiel, el corazón enológico de la Ribera del Duero presidido por el monumental castillo convertido en centro de interpretacion y museo del vino. Pues bien, a sus pies, en el amanecer de este siglo, abrió sus puertas una bodega que heredaba de sus antepasados lagares datados en el siglo XVII. La nueva sede nació cuando el vino familiar que Casimiro Marcos y su esposa María José Arranz compartían con los amigos dio un paso al frente, al exterior. Y aunque han crecido y son capaces de elaborar vendimias de 70.000 kilos de uva y de exportar el 70% de su producción, no han perdido su talante artesanal y el valor de la escasez y del tiempo de espera. Porque esa es su apuesta: materia prima y tiempo. Sus vinos, exclusivos y de alta calidad, son el resultado de mimo en la viña y paciencia en la sala de barricas y en el botellero. Abonos orgánicos, labores manuales (la cava, la poda, la trenza de sarmientos, la vendimia, el bazuqueo...), azufre de toda la vida y evitar herbicidas y productos químicos. Tal como lo han aprendido de las generaciones anteriores y tal como Casi, el propietario, es capaz de trasmitir con un tono ameno y didáctico a la vez. Le encanta hacerlo, y mostrar y compartir sus vinos, por eso el enoturismo es uno de los puntos fuertes de la casa. Dedican un gran espacio de la bodega a la recepción de los visitantes. Son 1.200 metros que encierran un museo de tradiciones vitivinícolas de la Ribera. Han reunido desde arados romanos, prensas, husillos, motores para regadío, las herramientas e inventos del taller de aperos de su abuelo y hasta los últimos utensilios de la enología actual, situados en su época, en su momento.
Los viñedos se extienden por Pagos de Santa Cruz, Pagos del Borro, Pagos de Carraovejas, Pagos del Hundido y Pagos del Chorrillo. Viñedos en laderas altas, sobre terruños calcáreos pedregosos con baja producción pero que permiten escoger la uva para un catálogo variado. Desde el Peñafalcón Crianza, con 2 años en barrica; el Reserva, con 3 años, o el Vendimia Seleccionada. La novedad son los Peñafalcón Siglo XI, la gama más alta, con, entre otros, un Crianza con 26 meses en barrica y este Peñafalcón Siglo XI Vendimia Seleccionada con 5 años en barrica, el más premiado y reconocido internacionalmente. Esta es la prueba.
Bodegas Peñafalcón
Calle Pisuerga, 42
47300 Peñafiel (Valladolid)