• Bartolomé Sanchez
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• 2006-09-01 00:00:00

Decía el sabio Nobel, Albert Einstein: «Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo». Cuando Aurelio Montes socio y enólogo de Montes, decidió plantar Syrah, variedad que era nueva en Chile, buscó los terrenos de mayor altitud, pobres y agrestes que disponía en la finca de Apalta, decisión que le reportó críticas por parte de sus colegas, y alguno hubo que calificó la idea de locura. Sobre todo teniendo en cuenta que disponía de tierras cerca de donde nace su maravilloso «Montes Alpha M» un vino que había reportado excelentes críticas en todo el mundo. Pero, ¿es acaso locura indagar en ese filo de lo imposible? Cuando se hace con el suficiente conocimiento, cuando la audacia, la intuición y la experiencia se unen, resultan obras que rayan en la genialidad. Y es el verdadero mérito de esta gran bodega que de la regularidad hace credo, que de vez en cuando nos ofrezca uno de esos vinos tan diferentes, con tanta personalidad que resulte imposible olvidarlos. Al compás de la Luna No hay más que leer la etiqueta de sus botellas para comprender que Dionisio de Nova quiere hacer vinos diferentes. Vinos que «bailen» al ritmo de las estrellas, según sus propias palabras. La pasión por la agricultura biodinámica le lleva a usar solo productos naturales y respetar de forma minuciosa el calendario estelar, que seguirá escrupulosamente en todo el proceso de elaboración, desde la poda a la copa. Sí, digo bien, la copa. Porque entre sus investigaciones ha descubierto un calendario del vino, donde una botella se comportará de forma distinta, dependiendo de la fecha en que se abra. Si se descorchara el día 8 de octubre del 2006 (por ejemplo) destacará la fruta sobre otros aromas. Si se abriera el 11 del mismo mes descollarán los tonos férricos. Es una ciencia a la que se debe acceder con espíritu analítico. Nosotros, más escépticos (e incapaces), lo que apreciamos en sus vinos es su meticulosa elaboración, la línea de firmeza de los tres vinos de la colección «Al Compás de la Luna». Diferentes, pero con un aire de familia. Dionisos Vinum Vitae 2004 La Bodega de las Estrellas. Unión, 82 - 13300 Valdepeñas (Ciudad Real) Tel. 926 313 248 info@labodegadelasestrellas.com. Sin D. O. (Vino de la Tierra de Castilla) Precio: 15 ?. Tipo: Tinto crianza. Variedades: Tempranillo. Crianza: doce meses en barricas nuevas de roble francés. Fecha de entrada: 5/6/2006 Consumo óptimo aproximado: 5 años a 16/18° C. Puntuación: 8,5/10 1ª Cata: Su despertar en la copa es bastante pausado. Por lo tanto es preferible abrir mucho tiempo antes de su consumo, mejor si se le proporciona el aire por él exigido y se le regala una decantación. Solo así brindará claros sus aromas de frutillos ácidos/maduros (frambuesas, grosellas) sotobosque, notas de torrefacto y especias. Lo mejor está en la boca, donde nos espera un paladar goloso, que se desarrolla con carnosidad y amplitud, y exhibe un tanino suave y bien pulido que prolonga la agradable sensación de vino. Montes Folly 2002 Montes Premium Wines. Santa Cruz. Valle de Colchagua (Chile) Distribuidor en España: Delgado Selección. Tel. 916331713 selección@grupodelgado.com. Precio: 45 ?. Tipo: tinto crianza. Variedad: Syrah. Crianza: 18 meses en barricas de roble francés. Fecha de entrada: 27/7/2006 Consumo óptimo aproximado: diez años a 16/18° C. Puntuación: 9,3/10 1ª Cata: Mantiene vivo un precioso color granate, cubierto y con grandes lágrimas. Se atreve a ir más allá de los típicos aromas varietales de violetas o aceitunas, en él se aprecia un excelente buqué de aromas bien ensamblados, desde los balsámicos iniciales a los frutillos, de los tonos tostados a las notas de ciruelas o de buena madera (cedro). Luce el encanto de su agradable carnosidad en el paladar, su viveza en el paso de boca, un tanino maduro tan bien trabajado que aparece sin aristas en el final de boca. Para gozar de su locura.