Política sobre cookies

Utilizamos cookies propias y de terceros, así como los datos de la conexión del usuario para identificarle. Estas cookies serán utilizadas con la finalidad de gestionar el portal, recabar información sobre la utilización del mismo, mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad personalizada relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos y el análisis de tu navegación (por ejemplo, páginas visitadas, consultas realizadas o links visitados).

Puedes configurar o rechazar la utilización de cookies haciendo click en "Configuración e información" o si deseas obtener información detallada sobre cómo utilizamos las cookies, o conocer cómo deshabilitarlas.

Configuración e información Ver Política de Cookies

Mi Vino

Vinos

CERRAR
  • FORMULARIO DE CONTACTO
  • OPUSWINE, S.L. es el responsable del tratamiento de sus datos con la finalidad de enviarles información comercial. No se cederán datos a terceros salvo obligación legal. Puede ejercer su derecho a acceder, rectificar y suprimir estos datos, así como ampliar información sobre otros derechos y protección de datos aquí.

Swissair y los vinos biológicos

  • Redacción
  • 1998-10-01 00:00:00

De aquí el año 2000, la compañía aérea Swissair pretende que el 90% de sus alimentos se produzcan ecológicamente. Actualmente, en los aviones de Swissair ya se sirven unos 18.000 litros de vino biológico cada año. Sandra Karl-Wälchli afirma que el concepto gastronómico “Naturalgourmet” es algo más que una estrategia publicitaria.

Vinum: ¿Cómo surgió el concepto de los alimentos biológicos? ¿Forma parte de una estrategia publicitaria o responde a una necesidad real?

Sandra Karl-Wälchli: Las dos cosas. Por supuesto, el nuevo concepto “Naturalgourmet” forma parte del plan global de relaciones públicas de la compañía, pero no queremos que se quede en una mera etiqueta.


Uno de los problemas ecológicos en las comidas de los aviones son los envases: recipientes de aluminio, latas, botellas pequeñas...

Uno de nuestros objetivos, por ejemplo, es sustituir los recipientes de aluminio por cajas de cartón fabricadas con papel reciclado. En los vuelos de larga distancia utilizamos botellas de vino de 750 ml.

Las líneas aéreas, como Swissair, simbolizan una movilidad sin límites. ¿Puede compaginarse esto con la ecología?

Aspiramos a una movilidad que cause los menores daños medioambientales posibles. Entre otras cosas, nuestro concepto “Naturalgourmet” implica utilizar productos procedentes de la zona donde se preparan las comidas. Los 1,6 millones de litros de leche biológica que necesitamos cada año en el aeropuerto de Zurich proceden de 200 granjas de la vecina región de Appenzell.

¿Qué vinos biológicos tienen actualmente a bordo?

En primera clase estamos sirviendo un burdeos blanco del 96, Château Haut Nouchet. En la clase de negocios, un Riesling Sylvaner del productor ginebrino Leyvraz & Stevens, de Peissy -en los vuelos largos- y un Château Caragnilhes blanco del 93, de Corbières -en los vuelos cortos-. Pero como no todos los viajeros están dispuestos a renunciar a su vino favorito, el vino biológico es sólo una opción más en el menú. En la clase turista no servimos vino biológico, porque resulta difícil obtener buena calidad en grandes cantidades a un precio razonable.

¿Con qué criterios seleccionan sus vinos biológicos?

La Compañía Swissair presenta una serie de exigencias a la empresa de compras del grupo Nuance Trading. A partir de esos datos, Nuance Trading ofrece propuestas concretas. La selección final de los vinos se realiza en el marco de una cata. Naturalmente, sólo consideramos los vinos con una etiqueta biológica controlada por el Estado.

¿Qué conclusiones pueden sacarse sobre su ofensiva biológica?

El concepto “Naturalgourmet” ha sido muy aceptado entre los pasajeros. La mejora de la imagen justifica plenamente las complicaciones logísticas.

enoturismo


gente del vino