• Laura López Altares
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• 2019-01-31 00:00:00

Días antes de conocer la nominación a los Oscar del aclamado corto 'Madre', de Rodrigo Sorogoyen, hablamos con su protagonista en el restaurante Alabaster (Madrid). Marta Nieto es de pasiones serenas y sueños tenaces.

Esa 'Madre' atormentada te está dando muchas alegrías. ¿Dirías que es tu papel más importante?

S í lo es. Primero porque es el último –y está muy presente–, pero también porque me ha llevado a un sitio muy complejo. Y no es solo el personaje y su situación –que a nivel interpretativo es un ejercicio superenriquecedor–, sino también cómo se rodó: al ser un plano secuencia es mucho más divertido. Además, ruedo con una persona con la que tengo una relación muy especial: nos llevamos muy bien, nos queremos mucho. Todo eso ya lo hizo muy especial. Y lo que ha ido pasando con el corto ha sido totalmente inesperado, ¡y ha derivado en el largometraje! [la película Madre se estrenará este año].

El corto es el punto de partida de  la película, ¿cómo la has vivido?, ¿qué te gustaría hacer ahora?

L a cuestión es: ¿qué hago después de haber hecho esto? Es como si me hubieran dicho: "¿Qué quieres hacer con tu vida profesional?" Y alguien me hubiera escrito el guión que quiero hacer y me hubieran regalado el personaje que me interesaba en este momento de mi vida. El papel está escrito para mí, es un regalo vital increíble, lo más difícil que he hecho nunca. Y estoy muy contenta. Ahora hay proyectos muy interesantes, pero me apetece ir con tiento porque lo que quiero hacer es cine, este tipo de trabajos complejos que me exijan mucho y a los que pueda dedicar mucho tiempo.

Sabemos que te encanta el vino, ¿crees que tiene algún paralelismo con el cine?

M e parece que son ayudantes en cuanto a la cualidad artística que tienen ambos. Están vivos. Y como elementos vivos, varían, tienen la cualidad del presente. No es igual una interpretación del mismo texto hoy que mañana; el mismo vino te sabe diferente si estás contenta o triste. Y además (al menos en mi caso) me hace sentir un grado mejor de lo que estaba antes de empezar (risas). Hay un dicho con otro alcohol que me encanta porque se parece mucho al vino (en esa parte mística), que es el mezcal: “Para todo mal, mezcal. Y para todo bien, también”. ¡A mí con el vino me pasa igual! 

Tú das mucha importancia a una alimentación saludable, ¿qué papel reservas al vino?

C on el yoga me he dado cuenta de que lo que comes se transforma en lo que eres. Todo lo que puedas ayudar a tu cuerpo a estar mejor a través de la alimentación es amor que te das. Y yo entiendo el vino de manera orgánica, natural, como algo eminentemente bueno. Para mí, el vino bien usado es un plus de alimentación. Una cena con una copa de vino en mi vida es parte de entender el proceso del día, de regalarme un momento de relax. Los estimulantes (té, café...) te llevan hacia un sitio muy estresante y el vino lo equilibra, relaja la ansiedad. Y es un antídoto.

Sabemos que tienes un sueño vinícola precioso... ¡cuéntanos con más detalles!

E l día que consiga que esto ocurra será un sueño cumplido, ¡es una de mis metas vitales! Hacer una experiencia de aprendizaje en pequeñas bodegas, y participar de eso teniendo el suficiente dinero como para comprar una barrica (o dos, o tres) y tener mi propio vino, abastecimiento para mí y mis amigos. Siento que no tengo capacidad para hacerlo –lo considero un arte, estoy dispuesta a aprender todo lo que se pueda y a vivirlo–, pero sí para gestionarlo. Tener mis botellas con una marca, un sellito; con amor, y poder regalarlo. Tenerlo en casa y saber que eso también es parte de mi vida.

¡El domingo 24 es el gran día! ¿Cómo vais a celebrarlo si 'Madre' gana el Oscar a mejor corto?

B rindaremos con vino, sin duda. Si ganamos sería un sueñazo (¡y un gran impulso para la película!), pero con ir ya está bien. El día que se anuncian las nominaciones va a ser muy especial. Estaré con los productores de la película, con el director... esperando a ver qué pasa, con las botellas de vino preparadas. De todo tipo, además (risas). Y si ganamos brindaré con Rodrigo, seguro. Hemos estado mano a mano en todo el proceso del corto, del largo... y ahora está montándolo y me deja participar del montaje. En fin, tengo mucha suerte, y se la debo en mucha medida a él.