• Redacción
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• 2013-02-01 09:00:00

La ciudad de Dresde, con su riqueza en cultura y tesoros artísticos, compite con la capital toscana. También desde el punto de vista arquitectónico, esta ciudad a orillas del Elba casi nos hace sentir transportados a Italia.

Dresde antes se llamaba Dreždźany, que en antiguo sorbio, un idioma eslavo occidental, significa algo así como ciénaga. Pero esta encantadora ciudad a orillas del Elba no se parece en nada a un cenagal. Solo en 2002, durante el breve tiempo que duró la mayor inundación del siglo, esta metrópoli sajona recordó a un paisaje pantanoso, pues el caudal del río Elba inundó extensas zonas del centro histórico causando graves daños, pero hace ya tiempo que están reparados. Quien hoy viaje a Dresde encontrará una impresionante ciudad barroca y comprenderá por qué este lugar se ha ganado el sobrenombre de la Florencia del Elba.
Aunque durante algunos años Dresde, con sus cerca de 18 kilómetros de río, fue Patrimonio Cultural de la Humanidad de la UNESCO, esta distinción le fue retirada por la construcción de un puente nuevo, situado a un tiro de piedra de numerosos lugares de interés cultural como el Zwinger, la Frauenkirche (Iglesia de Nuestra Señora) y la Semperoper (Teatro de la Ópera), pero todo ello fue desestimado. Aun así, incluso después de la resolución de la UNESCO, los ciudadanos de Dresde no han tenido motivo de queja: el flujo de visitantes no ha decaído y tampoco ha flaqueado la fuerza de atracción de sus tesoros artísticos y culturales.
Lo que puede sorprender al visitante de Dresde amante del vino es que en la zona urbana a lo largo del Elba existen fascinantes pequeños viñedos en las riberas, flanqueados por atractivos palacios y otros edificios magníficos. La extensa vega del valle del río, surcada por carriles-bici, ha logrado eludir en gran medida la proliferación de construcciones.
También desde el punto de vista culinario Dresde tiene bastante que ofrecer. Se puede imitar al que fuera Príncipe Elector, Augusto II el Fuerte (1670-1733), que no solo fue un generoso mecenas de las artes y la ciencia, sino que también organizó fiestas opulentas en el Club Wider Die Nüchternheit (club antisobriedad). Además, este hombre capaz de romper herraduras cambiaba de amante como de camisa…
La ciudad tiene una población de 520.000 habitantes y ofrece un variado programa de entretenimiento, con veladas de vals, bailes en el Teatro de la Opereta, semanas de danza, fiestas de la ribera del Elba, la noche de los palacios, las jornadas de música clásica al aire libre y el festival de jazz. Posee más de 20 museos y colecciones de arte, entre ellos el Museo de Historia Militar del Ejército, del que se ha hablado mucho recientemente por su controvertida arquitectura. Los visitantes quizá sigan viendo esta ciudad del mismo modo que Goethe tras su primer viaje a Dresde: “Hay tesoros increíbles de toda índole en este hermoso lugar”.

Nuestros consejos

COMER
Henricus
Neumarkt 12
01067 Dresden
Tel. 0351 263 59 62
www.restaurant-henricus.de
Aunque forma parte de la residencia de ancianos Heinrich Schütz, Henricus (junto a la iglesia Frauenkirche), malcría también a los jóvenes: medallones de rape o roast-beef con salsa de vino tinto.
Elements Deli & Restaurant
Königsbrücker Str. 96
01099 Dresden
Tel. 0351 272 16 96
www.restaurant-elements.de
Para acompañar el rape con caldo de coco, el experto personal del restaurante Elements nos recomienda el vino de cepa Scheu de Acham-Magin. Su casa de comidas adyacente, Deli, es más sencilla. En los diez metros de poyete de su gran ventanal podrán encontrar innumerables revistas especializadas, entre ellas VINUM.

Gasthof Bärwalde
Kalkreuther Str. 10a
01471 Radeburg-Bärwalde
Tel. 0352 08 34 29 01
El Landgasthof es famoso sobre tdoo por sus chuletas de cerdo. Desde hace ya más de cinco años está a cargo de Olav Seidel, que gestionó durante siete el Schwarzer Adler en Oberberger, junto a la pequeña cordillera del Kaiserstuhl, y lo sacó este restaurante del soñoliento Bärwalde de su posición de secreto... para llevarlo a ser un secreto a voces. Un parroquiano habitual de esta casa es el vinicultor superior Klaus Zimmerling.
Wein-Kultur-Bar
Wittenberger Str. 86
01277 Dresden-Striesen
Tel. 0351 315 79 17
www.weinkulturbar.de
Silvio Nitzsche antaño fue sumiller con Dieter Müller en el Schloss Lerbach de Bergisch Gladbach. Después se independizó con una astuta mezcla de bar, tienda de vinos y bistró. Es digno de mención su surtido de cafés y tés, más de treinta variedades de cada uno.

COMPRAR
Staatsweingut
Schloss Wackerbarth
Wackerbarthstr. 1
01445 Radebeul
Tel. 0351 895 50
www.schloss-wackerbarth.de
El Viñedo Estatal Sajón, a las puertas de Dresde, en Radebeul, no se puede reducir únicamente a la vinicultura. Además de realizar visitas guiadas a la bodega, el restaurante programa actos a lo largo de todo el año. Más información en su página web.

Sächsische Vinothek
An der Frauenkirche 13
01067 Dresden
Tel. 0351 484 52 00
www.saechsische-vinothek.de
Rolf Bretschneider y Ralf Walter no solo son vinicultores aficionados, sino desde 2007 también gerentes de una vinoteca centrada casi exclusivamente en Sajonia cuya oferta abarca más de 150 vinos diferentes. Los eventos frecuentemente tienen lugar en el campo: visitas guiadas a las bodegas y las viñas.
Edelrausch
Vinothek & Fromagerie
Bautzner Str. 2
01099 Dresden
Tel. 0351 810 33 70
www.edelrausch.de
Ambiciosa tienda de vinos, propiedad del Dr. Uwe Seifert y Alice Karstensen, con más de mil vinos, entre ellos algunos excelentes de Luxemburgo y otros de las mejores bodegas de Sajonia. Tienen una filial en la calle Loschwitzerstrasse y otra en Leipzig.

Bio-Birke
Rhefelder Str. 66
01127 Dresden
Tel. 0351 849 56 87
www.bio-birke-dresden.de
Joachim Birke empezó de joven, en 1971, en tiempos de la RFA, con una carnicería regional que transformó en ecológica tras la caída del Muro. Hoy, a sus 66 años, está considerado como carnicero de culto, en parte gracias a su jamón de caza curado al aire y sus salchichas blancas de Bratislava. También pertenece a la empresa una taberna castiza.

VITICULTURA
Böttcherei Götze
Dohnaer Str. 70
01219 Dresden
Tel. 0351 270 73 54
www.boettcherei-goetze.de
Rolf Götze aún practica el viejo oficio de tonelero: en su empresa hay apiladas cubas, tinas y tanques, todos manufacturados con maderas autóctonas. El propio Rolf Götze también hace vino, del que embotella anualmente 1.500 litros.
Dinglingers Weinberg
Dr. Christoph Hollenders
Schevenstr. 59
01326 Dresden
Tel. 0351 80 09 80
www.dinglingersweinberg.de
Un notario de Westfalia y su mujer empezaron a restaurar en 1999 un antiguo viñedo tradicional a orillas del Elba, con su feudal edifico de finca rural barroca. Actualmente cultivan tres mil cepas, cuya producción elabora la finca vinícola Schloss Proschwitz. Los vinos se pueden adquirir en el comercio de vinos de Dresde Edelrausch.

Weingut Klaus Zimmerling
Bergweg 27
01326 Dresden-Pillnitz
Tel. 0351 261 87 52
www.weingut-zimmerling.de
Klaus Zimmering, de profesión constructor de maquinaria técnica, es el orgullo de la vinicultura de Alemania del Este. Es miembro del VDP (asociación alemana de bodegas productoras de vinos de calidad) y está incluido en la lista de las 100 mejores fincas vinícolas de Alemania.

Genussmensch
Königstr. 6
01097 Dresden
Tel. 0351 219 681 00
www.genussmensch.org
La vivaz Roswitha Nitzsche siguió a su marido, el sumiller Silvio Nitzsche, a Dresde y ha abierto una Escuela de Vino y Disfrute combinada con una tienda. Ofrece seminarios sensoriales en los que se centra en el maridaje de vinos y alimentos.